El ex marino represor Ricardo Cavallo será extraditado para ser juzgado en Argentina por crímenes de lesa humanidad. La decisión del Ejecutivo español fue muy resistida por las entidades de los derechos humanos de Europa ya que daría por finalizada las actuaciones del juez Baltasar Garzón sobre las desapariciones en la última dictadura.
Cavallo está acusado de 227 desapariciones y 110 secuestros. La fiscalía española pedía para él 17.000 años de prisión.
Las actuaciones en esta causa estaban en manos de Garzón desde que el represor fuera detenido en México en el año 2000, y luego extraditado a España. Ya estaba bien avanzada la investigación, cuando la Justicia argentina solicitó un nuevo proceso de extradición para que sea juzgado por el juez argentino Sergio Torres.
Con la aceptación del gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, la causa por las desapariciones en las dictaduras latinoamericanas se escaparía de las manos de Garzón, que hasta ahora sólo ha podido sentar en el banquillo a Alfredo Schillingo. Días atrás, el juez español había dicho en una entrevista con el diario La Nación, que Cavallo tenía que ser juzgado «en la Audiencia (España) y no en los tribunales argentinos, donde todo va más lento».
Mientras algunos organismos de derechos humanos rechazan la medida, el abogado del ex marino se mostró conforme: «Lo entregarán a la Argentina y no volverá nunca más a España; aquí hubo ya demasiados intereses bastardos que lo complicaron todo», dijo Fernando Pamos de la Hoz.
En paralelo con la extradición de Cavallo se vuelve a poner atención sobre otro pedido similar que aún espera la decisión de las autoridades españolas: la vuelta de María Estela Martínez de Perón para que explique un decreto de su gobierno donde autorizaba el “aniquilamiento de la subversión”.
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www.clarin.com/diario/2008/03/01/elpais/p-00801.htm
www.pagina12.com.ar/diario/elpais/1-99948-2008-03-01.html
www.elpais.com/articulo/elpepuint/20080229elpepunac_11/Tes
