El secretario de Energía, Daniel Cameron, fue procesado por supuestas irregularidades en el control de los subsidios destinados a la concesionaria a cargo de los Yacimientos Carboníferos de Río Turbio entre 1995 y 2002.
El juez federal Sergio Torres dictó el procesamiento de Cameron por el presunto delito de ¨incumplimiento de los deberes de funcionario público¨ en el tiempo que integró la comisión fiscalizadora de la empresa concesionada. Cameron también estuvo procesado en la causa Skanska pero la Cámara Federal determinó su sobresimiento por ¨inexistencia de delito¨.
El fiscal Federico Delgado apeló la decisión de Torres por estar en desacuerdo con la calificación penal. Según su alegato, el delito cometido por Cameron es el de estafa, ya que ¨debían custodiar el interés público delegado en el concesionario¨ y, en cambio ¨toleró la significativa y múltiple gama de incumplimientos¨. Esta tolerancia, ¨los volvió cómplices de la defraudación porque sin esa tolerancia el hecho no hubiese ocurrido¨, según Delgado.
En la misma causa está procesado el empresario Sergio Taselli, socio principal en la privatización de la mina de Río Turbio en 1993, cuando el ex presidente Carlos Menem firmó un contrato por el cual se establecía la compra del total de la producción por parte del Estado durante diez años. Además, un subsidio anual de 16 millones de dólares.
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