Es difícil creer que los niños de hoy tengan que imaginar lo que era tener que presionar botones físicos, y no cifras en una pantalla táctil, para marcar un número de teléfono, pero para nosotros (las personas mayores que realmente vivimos esos tiempos), los teléfonos antiguos todavía tienen su encanto.
Algunos incluso guardamos esos dispositivos como recuerdos, y algunos, como Sehabettin Ozcelik, reparador de teléfonos de Turquía, los guardan todos. En su caso, la colección de móviles obsoletos consta de más de 1.000 modelos, entre los que se encuentran clásicos como el Nokia 3310 o el Motorola Razr V3.
“Empecé a hacer este trabajo por mi interés en los teléfonos móviles. Un día, decidí comenzar una colección, pensando que pronto quedarían obsoletas. Todos los teléfonos de mi colección todavía funcionan, pero ya no se fabrican”, dijo Ozcelik.
El técnico, quien guarda su preciada colección en su casa, dijo que solía tener casi 2.000 teléfonos diferentes, pero unos ladrones irrumpieron en su hogar hace un par de años, y se llevaron más de 700 dispositivos portátiles.
Ozcelik comenzó a coleccionar teléfonos celulares obsoletos hace unos 20 años, y le gustan mucho sus artefactos tecnológicos. A pesar de recibir ofertas por algunos de sus modelos más raros, no se desprendió de ninguno.
“Todos son modelos raros y muy valiosos. Algunos compradores se me acercaron y querían comprar algunos, pero no los vendí. Es un trabajo difícil mantenerlos en buen estado, pero quiero mantenerlos en las mejores condiciones tanto como pueda”, dijo el orgulloso coleccionista.
