Cuatro personas fueron detenidas en Los Ángeles por un insólito caso de fraude al seguro: fingieron ataques de úrsidos a sus autos de lujo con un disfraz. La estafa, bautizada como «Operación Garra de Oso» por las autoridades de California, logró recaudar casi 150 mil dólares antes de su descubrimiento.
El primer incidente ocurrió en enero de este año, cuando el grupo denunció que un oso había ingresado a su Rolls Royce Ghost 2010 estacionado en Lake Arrowhead, una zona conocida por su población de osos negros, y causado extensos daños en el interior. Sin embargo, el video que presentaron como evidencia llamó la atención de los investigadores por varios detalles sospechosos.
«Al examinar las imágenes con mayor detalle, determinamos que el oso era en realidad una persona disfrazada», explicaron fuentes policiales a NPR. Los movimientos poco naturales del supuesto animal y su color marrón claro (cuando los únicos osos de California son negros) fueron las primeras señales de alarma. Un biólogo del Departamento de Pesca y Vida Silvestre confirmó estas sospechas tras analizar los tres videos presentados.
La investigación reveló que el grupo había presentado dos reclamos similares por ataques de osos a otros vehículos de alta gama: un Mercedes G63 AMG 2015 y un Mercedes E350 2022. Para obtener pruebas definitivas, la policía allanó la vivienda de los sospechosos y encontró el disfraz completo, que incluía cabeza, patas y herramientas metálicas en forma de garras utilizadas para provocar los daños.
El caso, que la justicia revisa en la actualidad, podría terminar con los cuatro acusados tras las rejas. La creatividad en el intento de estafa no alcanzó para engañar a los expertos: el oso falso quedó expuesto y sus «domadores» deberán enfrentar las consecuencias legales de un fraude que rozó los 142 mil dólares.
