A poco más de un mes de las próximas elecciones legislativas, el Senado estadounidense logró aprobar por amplia mayoría la construcción de un muro fronterizo de 1.100 kilómetros de longitud que separará a ese país de México.
La aprobación se consiguió gracias al apoyo de muchos senadores demócratas, como Hillary Clinton, que, según varios analistas, estarían buscando beneficiarse con la aprobación de normas contrarreloj, antes de que los próximos comicios modifiquen la conformación de las cámaras.
La medida fue repudiada por las agrupaciones de inmigrantes y por el propio Gobierno de México, que lamentó la aprobación y estaría pronto a presentar una queja formal contra la Administración Bush.
Un comunicado de la Cancillería mexicana señala: “Estas medidas lastiman la relación bilateral y son contrarias al espíritu de cooperación que debe prevalecer para garantizar la seguridad en la frontera común”.
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www.elmundo.es/elmundo/2006/09/30/internacional/1159588728.html
www.elpais.es/articulo/internacional/elpporint/20060930elpepiint_1/Tes/
news.bbc.co.uk/low/spanish/international/newsid_5394000/5394134.stm
