Si bien la gestión de Kirchner frente al Rey Juan Carlos de España para que colabore como “facilitador” en el conflicto por la papeleras resultó favorable para el levantamiento de los cortes, las tres partes involucradas en el asunto (Argentina, Uruguay y ahora España) se mostraron cautelosas.
“Es un conflicto muy difícil”, señaló Zapatero antes de que finalizara la XVI Cumbre Iberoamericana de presidentes, que se realizó el fin de semana en Montevideo.
“España ha estado siempre interesada en que el conflicto se encauzara. En esta cumbre hemos dado un paso más, un paso que ha sido muy bien acogido tanto por Argentina como por Uruguay, que es hacer una tarea para facilitar el diálogo y buscar una solución”, explicó el mandatario español, quien aparece como el verdadero mentor de la movida.
Por su parte, Tabaré Vázquez agregó: “Uruguay y su gobierno apoyaron decididamente la actuación de Su Majestad. Pero por la experiencia vivida, hasta que no vea los resultados no voy a opinar”.
Incluso el propio rey Juan Carlos, en su única declaración, eligió mostrarse prudente. “Ya veremos, depende de los dos presidentes”, alcanzó a decir cuando lo consultaron acerca de las posibilidades de éxito de su gestión.
Por el lado argentino, el canciller Jorge Taiana mencionó: “Somos pueblos hermanos y todavía no pudimos alcanzar una solución, obviamente se trata de un conflicto difícil. Pero tenemos confianza en que el rey pueda alcanzar con su gestión de buenos oficios una solución satisfactoria para todos”.
Sin embargo, con respecto a los cortes de rutas, el canciller argentino dejó clara su postura: “la posición de Gualeguaychú no ha sido el generador de la controversia sino que ha sido justamente una reacción frente a la controversia”.
Más información:
www.pagina12.com.ar/diario/elpais/1-75729-2006-11-06.html
www.lanacion.com.ar/EdicionImpresa/politica/nota.asp?nota_id=856110
www.clarin.com/diario/2006/11/06/elpais/p-00501.htm
