Luego del sorpresivo paso de la Secretaria de Estado estadounidense, Condoleezza Rice, por Irak para apoyar el nuevo Plan de Seguridad interior del Gobierno, un doble atentado con coches bomba dejó este domingo un saldo de más de 50 muertos y al menos 128 heridos.
El ataque se produjo cerca de las 16.00 horas en el barrio Nueva Bagdad, una concurrida zona mayoritariamente chiíta del este de la ciudad. Los vehículos estaban estacionados a 100 metros de distancia uno de otro y habrían sido detonados por control remoto.
Desde la entrada en vigencia del nuevo Plan de Seguridad bautizado “Aplicamos la Ley”, hace cinco días, ya se han registrado tres grandes ataques que costaron la vida de más de 200 personas y varios ataques menores contra objetivos policiales y militares.
El Primer Ministro iraquí, Nuri al Maliki, y los funcionarios de la administración Bush contaban con que el Congreso aprobara el nuevo incremento en los gastos militares generales y el envío de otros 22.000 efectivos a Bagdad para retomar el control de las calles.
El revés legislativo de la Cámara de Representantes, ahora en manos demócratas, tornó inútil la aplicación del Plan iraquí, que no cuenta con los hombres y la infraestructura suficiente para hacer frente a la insurgencia en tantos frentes al mismo tiempo y detener, además, los enfrentamientos sectarios entre chiítas y sunitas.
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www.elmundo.es/elmundo/2007/02/18/internacional/1171806538.html
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