El presidente de los Estados Unidos, George W. Bush, defendió el uso de métodos duros en los interrogatorios de posibles terroristas, pero aclaró que la CIA no tortura. Las declaraciones surgen como respuesta a un informe periodístico que revela ‘el empleo de métodos violentos’ en 2005. Paralelamente, el Congreso norteamericano votó una ley para controlar el accionar de los contratistas del Departamento de Defensa que operan en zonas en conflicto.
Bush dijo a la prensa que los interrogatorios a «esos extremistas y terroristas» tienen por objetivo «proteger mejor a los ciudadanos estadounidenses.» Y explicó que son realizados por «profesionales altamente calificados» y «entrenados en este tipo de trabajo».
El diario The New York Times había revelado el jueves que el Departamento de Justicia aprobó en 2005 un memorandum secreto autorizando el empleo de métodos violentos como golpes en la cabeza, ahogamientos simulados y frío extremo. El mismo día, los legisladores demócratas criticaron los documentos desclasificados sobre el uso de duras técnicas de interrogatorios por parte de la CIA.
Frances Townsend, consejera de seguridad nacional de Bush, aseguró que menos de una tercera parte de unos 100 detenidos fue objeto de interrogatorios agresivos: «Los métodos son legales – dijo, y agregó – cuando estadounidenses son asesinados en atentados entonces el pueblo estadounidense tiene absoluto derecho a preguntarse por qué.»
Paralelamente, la Cámara de Representantes de Estados Unidos aprobó la llamada Ley «Blackwater», que permitirá el procesamiento en tribunales estadounidenses de los contratistas de seguridad del Departamento de Defensa que trabajen en Irak. La normativa sale en medio de las investigaciones sobre el tiroteo en Bagdad del 16 de septiembre, en el que empleados de la compañía de seguridad Blackwater mataron a 11 iraquíes.
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www.lanacion.com.ar/950559
news.bbc.co.uk/hi/spanish/international/newsid_7029000/7029107.stm
www.perfil.com/contenidos/2007/10/05/noticia_0037.html
