Bajo un clima de apatía general, hoy culminan los comicios para renovar la conformación del Parlamente Europeo. El alto abstencionismo terminaría favoreciendo a los candidatos más radicales, temiéndose un importante avance de las opciones de extrema derecha.
Más de 375 millones de europeos decidirán hoy en las urnas cómo quedará la próxima Eurocámara, máxima instancia legislativa en la Unión Europea. Pese a la apatía en el electorado, estas elecciones son importantes porque a partir de octubre comenzará a regir el nuevo tratado que le confiere al Parlamento Europeo competencias de gran peso para toda la región.
Sin embargo, la campaña electoral se diluyó en rencillas internas y la mayoría de los 19 países que eligirán eurodiputados terminaron usando a estos comicios como sondeos de los respectivos gobiernos. Lo cierto es que el nuevo Parlamento deberá decidir en breve sobre las futuras ampliaciones (Turquía y los Balcanes esperan su ingreso), cambio climático y la defensa de los derechos laborales (que Gran Bretaña busca recortar), entre otros puntos.
Si se confirma el alto abstencionismo que reflejan las encuestas previas, se terminarían beneficiando notablemente los partidos de la extrema derecha, con posibilidades de alcanzar los 100 escaños en la Eurocámara. La izquierda, en tanto, podría ganar presencia si los votantes deciden castigar a sus gobiernos (en su mayoria liberales) por la crisis económica que ahoga a la región.
Más información
www.bbc.co.uk/mundo/internacional/2009/06/090606_0343_europa_ultima_votacion_jrg.shtml
www.elpais.com/articulo/internacional/elpepuint/20090607elpepiint_6/Tes
www.elmundo.es/elmundo/2009/06/06/espana/1244317729.html
