El magistrado subrogante Juan Pablo Chirinos aclaró que restan por conocerse resultados de distintas pruebas para confirmar la situación de Susana Freydoz, la esposa de la víctima. También reconoció que los resultados de la autopsia no son definitivos.
El juez subrogante Juan Pablo Chirinos, que lleva adelante la causa por la muerte del gobernador de Río Negro, Carlos Soria, explicó el martes que está trabajando sobre la hipótesis de que existió «homicidio doloso», aunque aclaró que todavía restan por hacerse varios análisis para avanzar en la investigación.
«Hay más pruebas que tenemos que realizar. La autopsia no da definiciones sobre distancia del disparo, sí sobre las causas de muerte, que es la herida de bala que le causa un edema cerebral», aseguró el magistrado, quien dijo que el dermotest a la víctima confirmó que no manipuló el arma con la que se dispararon las balas que lo mataron, pero que dichos resultados «no son definitivos».
En ese sentido, el juez quien reemplaza al juez Emilio Stadler, de vacaciones, hasta el 16 de enero, agregó: «Tenemos que analizar si hay residuos del disparo de bala para ver a qué distancia fue realizado el disparo. Había algunas conclusiones que arrojaban que había sido a más de 40 centímetros y otras que no, por eso queremos aclarar estos puntos con más pruebas de barrido electrónico».
