Es el segundo día de protesta, en repudio al proyecto de saneamiento del Riachuelo que contempla reubicar la feria en otro predio. El lunes, un operativo con más de mil policías y gendarmes desmanteló unos 10 mil puestos de venta.
Por segundo día consecutivo, un grupo de puesteros desalojados el lunes de la feria La Saladita, en el partido bonaerense de Lomas de Zamora, mantienen cortado el tránsito en el Camino Negro, a la altura del Puente de la Noria.
Los feriantes se manifiestan en rechazo a ser reubicados, luego del operativo que desmanteló unos 10 mil puestos de venta a la vera del Riachuelo, en las calles La Ribera y Newton, como parte del plan de Saneamiento Integral llevado adelante por la Autoridad de la Cuenca Matanza-Riachuelo (ACUMAR).
«No es un desalojo, es un traslado. Estas personas van a mantener su fuente de trabajo, legalizándose», había sostenido el jefe de Gabinete de la Nación, Juan Manuel Abal Medina, quien supervisó el procedimiento, del que debieron participar unos mil efectivos de la Policía Bonaerense y Gendarmería.