En la última audiencia pública de su pontificado, Benedicto XVI dio un discurso ante más de 200 mil personas en la Plaza San Pedro en el que agradeció a los fieles ¨el respeto y la comprensión¨ con la que recibieron su dimisión.
¨Di este paso en plena conciencia de su gravedad y también novedad, pero también con una profunda serenidad de ánimo¨, resaltó el Papa, y agregó que lo hizo con plena libertad. ¨Doy gracias a Dios por sus dones, y también a tantas personas que, con generosidad y amor a la Iglesia, me han ayudado en estos años con espíritu de fe y humildad¨, expresó desde el tercer piso del Palacio Apostólico. Entre la gente estaba presente todo el cuerpo diplomático, incluso Juan Pablo Cafiero, el embajador argentino ante el Vaticano.
Joseph Ratzinger agradeció, además, ¨el respeto y la comprensión¨ con la que los fieles ¨han acogido la decisión¨ y los exhortó a rezar por los ¨por los Señores Cardenales, llamados a la delicada tarea de elegir a un nuevo Sucesor en la Cátedra del apóstol Pedro¨. ¨No abandono la cruz, sigo de un modo nuevo. Estoy verdaderamente conmovido y veo a la Iglesia viva¨, afirmó. De esta manera, el Papa oficializó su renunciada, anunciada el pasado 11 de febrero.
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