El rostro de tu madre puede estar hablando de tu futuro. Según un estudio publicado por la Asociación Americana de Cirujanos Plásticos (ASPS, por su sigla en inglés), la genética tiene una gran incidencia en el envejecimiento y la aparición de arrugas. Científicos realizaron una investigación en madres e hijas de entre 15 y 90 años, y observaron que los signos de envejecimiento se repetían en los rostros de ambas mujeres, sobre todo en la zona que rodea a los ojos.
No todo es genética
Sin embargo, no tenemos que resignarnos a los dictámenes de la genética. Si bien existen factores hereditarios condicionantes en el deterioro de la piel, el estilo de vida saludable y los cuidados específicos pueden hacer la diferencia entre el cutis de una madre y el de su hija.
La mirada experta
“No todo es cuestión de herencia en relación con las arrugas”, asegura la Dra. Annabelle García, dermatóloga de ‘Sonterra Dermatology’, en San Antonio, Texas. “El envejecimiento de la piel está asociado a la genética, pero también es producto de hábitos poco saludables como el tabaco y la falta de cuidados de la piel en general”.
El sol es determinante
Según la especialista, otros factores como la exposición excesiva al sol afectan las células de la piel y pueden dañar los tejidos que ayudan a prevenir las arrugas. Esto puede ser igual o más determinante que la genética en el deterioro de la piel. “Por eso, es muy importante usar bloqueador solar todos los días, con un mínimo factor de protección solar de 30”, señala.
Productos específicos
Si observas en tu familia una predisposición a desarrollar arrugas prematuramente, ayuda a tu piel a contrarrestar esa tendencia. “Las cremas elaboradas a base de Retinol (Vitamina A) pueden prevenir arrugas y borrar manchas de la piel causadas por el Sol”, recomienda García.
Disciplina
Utilizar estos productos a partir de los 30 años es una inversión a futuro, pues ayuda a retrasar la aparición de signos de envejecimiento en el cutis. “Estas cremas estimulan la formación de colágeno y ayudan a borrar las arrugas pequeñas y superficiales”, asegura la experta. “Otras cremas que pueden ayudar a lucir la piel más joven y sana son las que contienen antioxidantes como las vitaminas C y E”, recomienda.
