Impulsados por la facilidad de las aplicaciones de ropa de segunda mano, y el deseo de opciones de indumentaria sostenible, los compradores que antes acudían en masa a la moda rápida, están recurriendo al ahorro en cantidades cada vez mayores.
Según el informe de ThredUp de 2021, se proyecta que el mercado de ropa de segunda mano en EE. UU. se duplique a USD 77 mil millones entre 2021 y 2025. La mayor parte de ese crecimiento provendrá de la reventa, que se espera que crezca 11 veces más rápido que el sector de la ropa en general.
En este marco y con un guiño nostálgico a su época de apogeo (los 80’s), Banana Republic acaba de lanzar una colección limitada de 225 piezas vintage de la marca seleccionadas especialmente.
La marca trabajó con Thrilling para obtener los artículos vintage en los EE. UU., que está revendiendo online y en una de sus tiendas de Nueva York.
Como “Banana Republic Travel & Safari Clothing Company”, la compañía comenzó como una tienda de excedentes en 1978, por lo que no es ajeno a la venta de ropa reutilizada.
“Los archivos de BR eran una mina de oro sin explotar. A medida que avanzamos en el relanzamiento de la marca, queríamos aprovechar tanto al cliente original de BR, que siente una fuerte nostalgia por nuestro producto de la década de 1980, como a la próxima generación, que está obsesionada con las ferias americanas y la ropa de segunda mano”, dijo la directora de marca Ana Andjelic. “Nuestras piezas de archivo van desde artículos que pueden confundirse fácilmente con lo mejor de la moda urbana moderna, hasta flores que son tan acampadas que son geniales. En el medio hay todo tipo de chaquetas militares súper modernas, chalecos de safari, chaquetas de cuero, pantalones cortos y gorras «.
Pero Banana Republic no es la primera marca de moda que vende artículos favoritos de sus propios archivos; el año pasado, Levi’s creó un programa de recompra y un mercado de artículos usados, y Guess lanzó una línea vintage certificada.
