El estudio Practice Architecture, con sede en Londres, construyó la primera casa familiar utilizando paneles prefabricados hechos con cáñamo. Los arquitectos trabajaron estrechamente con sus clientes de Margent Farm, ubicada en Cambridgeshire, Inglaterra, quienes administran una granja de cáñamo y lino para desarrollar bioplásticos. El resultado es una casa sostenible de tres habitaciones denominada Flat House, que cuenta con un diseño de paquete plano que utiliza materiales cultivados en la propiedad de 20 acres.
La casa fue diseñada como un prototipo de construcción basado en el cáñamo, con la intención de introducir este nuevo método en la industria de la construcción para proyectos a gran escala. Flat House se encuentra en Margent Farm, una instalación agrícola de 53 acres en la zona rural de Cambridgeshire que tiene como objetivo mostrar las capacidades del cáñamo, una cepa de rápido crecimiento de la planta de cannabis.
La casa familiar de 100 metros cuadrados se construyó con un marco de madera y paneles de cassette con aislamiento de cáñamo y cal. Además, el hogar está revestido con láminas corrugadas de fibra de cáñamo y resina de azúcar, con ambos materiales cultivados en el sitio. Los paneles de casete rellenos de cáñamo y el revestimiento fueron prefabricados fuera del sitio, lo que permitió ensamblar la parte principal de la casa en solo dos días.
El resultado final es una casa rústica de tres dormitorios con una sala de estar de planta abierta, y baño. El interior de la casa cuenta con grandes espacios abiertos; pisos de madera natural; abundancia de ventanas, luz natural y buen flujo de aire; cocina de doble altura, sala y comedor; y dormitorios privados ubicados en el segundo piso.
Muchos de los paneles de cáñamo han quedado expuestos en todo el interior de la casa, lo que se suma a su estética cálida y rústica. El material de cáñamo natural es transpirable, lo que permite mejorar la calidad del aire y controlar la humedad, al tiempo que evita el desarrollo de moho y hongos. La casa está equipada con una caldera de biomasa para sus necesidades de calefacción y paneles solares en su techo para vivir fuera de la red.
