No hace tanto tiempo, las personas cosían su propia ropa, o las mandaban a confeccionar por un miembro de la familia o una costurera local.
Hoy en día, los consumidores son cada vez más conscientes del coste medioambiental y humano de la moda rápida. Pero la pandemia también provocó una oleada de costura, con máquinas que se agotaron, y los consumidores descubriendo el placer y la satisfacción de crear artículos para vestir.
Una empresa emergente del Reino Unido tiene como objetivo reavivar esa práctica, facilitando que los costureros menos experimentados creen su propio guardarropa.
Al igual que IKEA ofrece exactamente lo que se necesita para construir una estantería, cada pieza aserrada a la medida, perforada previamente y completa con tornillos, Pattern Project se encarga de la preparación de la costura, y los clientes se encargan del montaje. Cada kit de ropa incluye paneles de tela precortados con costuras premarcadas, hilo a juego e instrucciones.
Los compradores necesitan acceso a una máquina de coser, plancha y tabla de planchar, y deben saber coser puntadas rectas básicas y pespuntes.
Todos los kits se producen bajo demanda en la micro-fábrica de la nueva empresa en el sur de Londres, por lo que no hay exceso de existencias.
Pattern Project actualmente está ejecutando una prueba piloto, y se lanzará en Kickstarter en mayo 2021, donde uno de los primeros kits será un par de calzoncillos.
Su producto beta es una camisa de manga corta hecha de una mezcla de algodón / lino orgánico tejida en Lancashire y acabada en Yorkshire, con un precio de 50 euros.
