A través de un decreto publicado en el Boletín Oficial, la jefa de Estado transfirió el control a la Fuerza Aérea. El secretario general de APTA, Ricardo Cirielli, sostuvo que la medida refleja «incapacidad para resolver los problemas».
A través de un decreto, la presidenta de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner, traspasó a la Fuerza Aérea las funciones de control operativo de los servicios de navegación aérea, en el medio de un conflicto sindical por el que desde el sábado permanecen suspendidos todos los vuelos internacionales de Aerolíneas Argentinas.
La medida fue publicada en el Boletín Oficial, y transfiere el «control de la prestación de los servicios de navegación aérea y de coordinación y supervisión del accionar operativo del control aéreo», que desde 2007 estaban en manos de la Administración Nacional de Aviación Civil (ANAC).
«Para el mejor cumplimiento de las finalidades tenidas en mira al momento de la creación de la ANAC, y siguiendo recomendaciones de la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI), resulta necesario y conveniente que dicha Administración no tenga a su cargo la prestación de los servicios de navegación aérea, cuya actividad regula y le compete fiscalizar», agrega el texto, fichado en Río Gallegos, Santa Cruz.
Al respecto, el secretario general de la Asociación de Personal Técnico Aeronáutico (APTA), Ricardo Cirielli, calificó el decreto como una «incapacidad para resolver los problemas», y recordó que «uno de los logros» de la gestión de Néstor Kirchner fue «haber unificado toda la aviación en un solo organismo y que dependiera de civiles», por lo que la medida «sería un retroceso».
