Las razas de perros más miedosas

El primer dato que arrojó el estudio es que los perros de ciudad son más miedosos que los perros de zonas rurales. Y también que los perros más activos son menos miedosos. «Ya se ha descubierto que la actividad y los estímulos tienen un efecto positivo en el comportamiento, tanto en los perros como en los humanos. Por supuesto, la menor actividad de los perros temerosos también puede deberse a que sus dueños quieren evitar la exposición de sus perros a situaciones estresantes. Puede ser que las personas no sean tan activas con los perros temerosos», explicó el profesor Hannes Lohi de la Universidad de Helsinki.
Los resultados del estudio demuestran qué porcentaje de los perros de una raza analizados tuvieron miedo ante esa situación. De esta manera, un porcentaje alto significa que la raza tuvo más miedo, y un porcentaje bajo significa que esos perros tuvieron menos. Por ejemplo, el Labrador Retriever logró excelentes resultados en lo que respecta al miedo a los truenos. Quedó en la última posición en esta categoría con apenas un 5% de los casos estudiados demostrando temor a los truenos. También les fue bien en lo que respecta al miedo a los extraños, con un 8%.

De todo el estudio, el perro de agua español fue la raza que más miedo le tuvo a los extraños: un 28% de los casos. Les fue bastante mejor en lo referente al miedo a los truenos: 12%.

Sus resultados fueron muy buenos en cuanto a miedo a los truenos, con apenas 10%. Pero en miedo a los extraños obtuvieron un 22%.

Fue la raza que más miedo le tuvo a los truenos, con 34%. En «Miedo a los extraños» se ubicaron en el grupo del medio, con un 15%.

El Wheaten Terrier quedó entre los más miedosos en lo que respecta a los truenos: un 28% de ellos mostró miedo en esa situación. Por otro lado, demostraron ser valientes en lo referente al miedo a los extraños: apenas un 7% lo manifestó.
«Las diferencias entre las razas apoyan la noción de que los genes tienen un efecto sobre el miedo, así como sobre muchos otros problemas de salud mental. Esto nos anima a llevar a cabo más investigaciones, especialmente en términos de herencia. En definitiva, este estudio nos proporciona herramientas para mejorar el bienestar de nuestro mejor amigo: una socialización diversa en la etapa de cachorro, un estilo de vida activo y unas elecciones de cría cuidadosamente realizadas pueden reducir significativamente el miedo social», consideró el profesor Hannes Lohi.

22% de ellos tuvo miedo a los truenos, y 11% demostró miedo a los extraños.

El perro que menos miedo le tiene a los extraños: apenas un 2% demostró temor en esa situación. Prácticamente nada.

Fue la segunda raza más miedosa en lo que respecta a los extraños, con un 26%. En miedo a los truenos les fue mucho mejor, con 13%.

Demostraron mucho miedo a los extraños, y a lo mejor su pequeño tamaño tiene algo que ver con eso: 24%. En miedo a los truenos les fue mucho mejor, con 14%.

Les fue muy bien en miedo a los truenos: 11%. Un resultado similar al 12% que mostraron en miedo a los extraños.

Un perro relativamente poco miedoso: el 18% de ellos tuvo miedo a los truenos y apenas el 8% sintió miedo ante extraños.

Esta raza obtuvo excelentes resultados en miedo a los extraños, con apenas 7%. Pero en miedo a los truenos tuvo el triple: 21%.

Tuvo resultados que lo colocaron en el sector medio del estudio: 15% tuvo miedo a los truenos y 11% miedo a los extraños.

Una raza poco miedosa a la que le fue bien en ambas categorías del estudio: 8% en miedo a los extraños y 12% en miedo a los truenos.